Egiptomanía en Barcelona

Muchos barceloneses sienten fascinación por el antiguo Egipto.
Barcelona cuenta con el Museu Egipci, fundado en 1994 gracias a la
iniciativa del empresario hotelero Jordi Clos; con la Societat Catalana
d'Egiptologia, y con dos doctorados relacionados con el mundo de los
faraones: el máster de Lengua y Civilización del Antiguo Egipto, en la
Universitat Autònoma, y el de Estudios Avanzados en Egiptología, que
depende de la Facultat de Geografia i Història
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De arriba abajo, unos
niños contemplando una momia en el Museu Egipci, la tienda El Escarabajo
Azul y una sala del restaurante El Nilo. ARCHIVO

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De arriba abajo, unos
niños contemplando una momia en el Museu Egipci, la tienda El Escarabajo
Azul y una sala del restaurante El Nilo. DANNY CAMINAL

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De arriba abajo, unos
niños contemplando una momia en el Museu Egipci, la tienda El Escarabajo
Azul y una sala del restaurante El Nilo. ARCHIVO
El Museu Egipci va mucho más allá del espacio museístico que acoge exposiciones como Moda y belleza en el antiguo Egipto, que
mantiene las puertas abiertas hasta el 20 de julio. El centro engloba
una escuela de egiptología con cuatro aulas de formación y una
biblioteca con 10.000 documentos -entre ellos, Description de l'Egypte, con las láminas que realizó la expedición de Napoleón-.
También
dispone de un campus arqueológico situado en Palau-solità i Plegamans, a
20 kilómetros de Barcelona, y un club privado que convoca cenas,
conferencias, rutas arqueológicas, foros literarios, visitas a
exposiciones y salidas de fin de semana. Además, organiza visitas
nocturnas al museo, talleres infantiles y expediciones culturales a
Egipto.
Muchas personas entran por la tienda. Sus libros más vendidos son el Diccionario de jeroglíficos egipcios y El descubrimiento de la tumba de Tutankhamón,
coescrito por el autor del hallazgo, el arqueólogo inglés Howard
Carter, y Arthur Mace, uno de los miembros de la expedición. Entre los
objetos, los más solicitados son una goma de borrar con forma de
pirámide, jabón de leche de burra y la alfombrilla para el mouse con la foto de la piedra de Rosetta.
La
arqueóloga Bibi Solanes, directora de las expediciones culturales del
museo, afirma que en Barcelona hay mucha egiptomanía. «Hasta en los
detalles de fachadas y en los logos», añade. Entre ellos, el del Centro
de Oftalmología Barraquer, que es un Udyat, el protector ojo de Horus.
Los egipcios residentes en Barcelona se reunen en El Nilo, local que dispone de una sala para fumar con shisha,
una pipa de agua. Su especialidad es el pastel de berenjenas con
pimiento, patatas y carne picada. Los restaurantes Soltana y El Templo
de las Tinieblas sirven platos tradicionales. En el sector tiendas
destacan El Escarabajo Azul, en el barrio de Gràcia, e Isis, el Mundo
Egipcio, donde venden los típicos recuedos

genialllllllllllllllllllll cuando vaya ya sabeis mis momi@s catalanes donde teneis que llevarme tambien,tiene que ser una pasadaaaaa