UN REY CAZANDO PATOS

La única representación regia de la escena de caza de aves en los pantanos la encontramos en la tumba KV o WV 23 perteneciente a Ay, rey de finales de la XVIII Dinastía (1.327-1.323 a.C.), sucesor en el trono de Tutanjamon. En una doble escena, en pésimas condiciones de conservación a causa de los daños infligidos intencionadamente y un tanto distinta de las nobles tebanas, se muestra a Ay de pie en la preceptiva canoa con un bastón arrojadizo en una de sus manos y cuatro patos en la otra que sirven de reclamo para aquellos a los que intenta dar caza. A su derecha y separado por la típica mata de papiros sobre la que se ven tres hileras ordenadas de patos salvajes, Ay pasea con su esposa Tiy en otra canoa.

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Si el motivo de esta representación en la capilla de una tumba real lo es por no pertenecer Ay al linaje real de la XVIII Dinastía, o por si la tumba no hubiera sido en un primer momento pensada para albergar el cuerpo de este difunto, es un tema excesivamente extenso como para tratarlo aquí, tan sólo tener en cuenta que es el único motivo similar que se ha hallado en la capilla de una tumba real hasta el momento.

Fuente

pues aunque su conservacion sea algo pesima,al menos llego hasta nuestros dias para poder contemplar otra maravilla del mundo de los faraones,es preciosa gracias por este aporte tan genial elhobbyt

tenia que ser dificil cazar patos de esa manera,que pena de conservacion.

pd.- el enlace lleva a una pagina de jeroglificos

Bueno , nos podemos dar por satisfechos que haya llegado al menos hasta nuestros dias, mejor si estuviese en perfecto estado o cuando menos medianamente conservado.

Corregido el enlace , gracias Jucarese.


LA ESCENA DE CAZA EN EL DESIERTO
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Se trata de un tema elegido especialmente durante el reinado de Tutmosis III y podríamos, al igual que las escenas de caza y pesca, considerarla como una muestra más de las actividades deportivas que se realizaban esas épocas del antiguo Egipto, pero la comentada lucha contra las fuerzas del caos se manifiesta abiertamente en esta escena. El paisaje del desierto es sugerido por el color rosáceo de las onduladas dunas de arena junto a una escasa vegetación diseminada por la composición. El paisaje muestra, en principio, una sensación de calma idílica gracias a las actitudes de los animales: unos descansan, las gacelas están representadas en el mismo instante de dar un salto; pero si nos fijamos bien, esa calma es rota por toros salvajes, hienas, avestruces, liebres y otros animales huyendo del cazador quien, montado en su carro, lanza flechas con su arco contra los animales a los que persigue siendo recogidos por los sirvientes de aquél.



Esta escena la podemos encontrar en la parte final de los muros de la sala transversal en las tumbas tebanas de la XVIII Dinastía, aunque la zona de la capilla más comúnmente elegida para su representación es el muro derecho de la sala longitudinal junto con los ritos funerarios.

que maravilla la verdad es que el poder contemplarlos en nustra epoca ya es un gran logro,en las exposiciones que he podido visitar aqui en madrid,los grabados expuestos eran maravillosos,se podia apreciar casi todo tenian muy buena conservacion contando con la cantidad de siglos en los que has sido expuestos a muchos cambios,es impresionante poder verlos,ojala los proximos sean alli en su tierra :flor: :flor: